Os pongo en antecedentes:
Cada año la fiesta de Halloween cobra más vida (¡qué contradicción!) en nuestro país. Son tradiciones que aunque a algunos no les guste demasiado, se están haciendo un hueco en nuestra sociedad. Así que, ¿por qué no enriquecernos con nuevas celebraciones? y más cuando traen consigo ¡galletas y cupcakes!
Además, ¿qué sabemos de Halloween?
Pues para empezar, que viene de la expresión inglesa
All Hallows´ Eve, que significa, Víspera de Todos los Santos.
Antiguamente los celtas celebraban esta festividad como símbolo del fin del verano y comienzo de una estación más oscura, el otoño, en la que poca cosa quedaba por recolectar y en la que debían prepararse para un duro invierno.
Aún en España y cada vez cobrando más fuerza, se celebra en estas fechas la fiesta de la castaña ¡qué ricas asaditas! y del boniato .
Tal vez por la fuerza que está adquiriendo esta fiesta, en nuestro país y en muchos otros, las Diócesis han creado otra fórmula para llamar a esta celebración pagana y cristianizarla cambiando Halloween por “Holywins” (el Santo gana).
Hasta aquí las curiosidades y ahora, que mejor que comenzar esta nueva aventura que con Halloween y unas deliciosas galletas decoradas!
Éstas han sido horneadas y decoradas para celebrar una fiesta de lo más terrorífica! (Gracia, me alegro de que os hayan gustado).
¡¡Nos vemos!!